Cuatro años de cárcel por intentar matar con una loseta en la cabeza a un joven en una pelea

Sevilla
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Cuatro de años de cárcel por intentar asesinar a un joven en el transcurso de una pelea en los aledaños de una discoteca ubicada en la isla de la Cartuja de Sevilla en abril de 2014. Para ello utilizó un trozo de loseta del pavimento y le golpeó en la cabeza. La víctima sufrió traumatismo craneoencefálico, con fractura con hundimiento craneal, hematomas y lesión de alto impacto. Hoy padece secuelas como el síndrome postconmocional, material de osteosíntesis en cráneo y síndrome de estrés postraumático.

Sobre las siete de la mañana del 30 de abril de 2014 en el exterior de la discoteca Antique se inició una discusión entre integrantes del grupo formado por Gabriel R.G., Saúl H.R. y D.D.T., por una parte, y el integrado por D.M.P. y R.J.M.L., por otra.

Este enfrentamiento resultó ser la continuación de una discusión iniciada en el interior del establecimiento nocturno, en la que se había producido un cruce de palabras sin mayor entidad. Al encontrarse en la salida de la discoteca ambos grupos se enzarzaron en una discusión que degeneró en pelea.

En el curso de este enfrentamiento, D. M. P. hizo frente a otras dos personas, golpeándose unos y otros con unas sillas de plástico que había en el exterior de la discoteca. Esta situación fue aprovechada por Gabriel R. G., que tiene actualmente 30 años, para acercarse por la espalda a D.M.P. y, de modo súbito y sin que la víctima pudiera prevenirse, asestarle un fuerte golpe en la cabeza con un trozo de loseta del pavimento.

Como consecuencia del impacto, el agredido comenzó a tambalearse. Luego vino un segundo golpe en la cabeza y, entonces, ya cayó al suelo semiinconsciente.

Para la Audiencia de Sevilla, al actuar así, el acusado aceptaba la alta probabilidad de causar la muerte con su acción. Pero ahí no quedó la agresión, pues estando la víctima en el suelo, un tercer joven que no ha sido enjuiciado le propinó una patada en la cara.

Drogas y alcohol

En las horas previas a estos hechos el principal acusado había estadoconsumiendo sustancias estupefacientes, así como ingiriendo bebidas alcohólicas, de manera que tenía mermada su capacidad de controlar sus impulsos y comprender las consecuencias de sus actos, una circunstancia que ha válido al tribunal de la Sección Cuarta para considerar la atenuante muy cualificada de drogadicción y obrar bajo los efectos del alcohol, según la sentencia facilitada a este periódico por el TSJA.

Este hecho sumado a que antes del juicio el acusado abonó a la víctima 39.500 euros en reparación del daño, otra atenuante, la Sala ha rebajado la pena impuesta por un delito de grado de tentativa a cuatro años de prisión y al pago de una indemnización de 57.364 euros, a descontar lo pagado por adelantado.

Los hechos que se le atribuyen a Gabriel son para la Audiencia constitutivos de un delito de asesinato en grado de tentativa, frente a lo que opinaba la Fiscalía, que consideraba un intento de homicidio. Actuó de forma alevosa, evitando que la víctima se pudiera defender. Los dos golpes en la cabeza con un trozo de loseta supuso un riesgo alto para la vida de la víctima. No fue una acción propia de quien busca lesionar a alguien.

La Audiencia, en el juicio del pasado mes de octubre, analizó también los hechos en los que protagonistas fueron R.J.M.L. y el otro acusado, Saúl H.R. Tras una discusión, Saúl, de 28 años de edad, agredió al otro joven en la cara, causándole una herida incisa en el párpado.

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